La hiperrealidad digital se está adueñando de nuestras vidas, ya no existe la vergüenza por admitir o dejar entrar a la audiencia a lo más privado de nuestra cotidianidad, nuestros seguidores tienen acceso a nuestra intimidad de manera abierta y en tiempo real. Los creadores de contenido nos enseñaron que exponerse públicamente era algo perfectamente natural y hoy estamos totalmente familiarizados de ver personas reales haciendo cosas reales, siendo ellos mismos, dando su opinión en vivo sobre temas privados y personales.
Sin embargo, la comunicación política va en otra dirección.
“Las personas votamos espejo, es decir queremos vernos representados en el candidato, pero no de manera exagerada.“
Definitivamente la autenticidad está en auge. El contenido original, espontáneo y disruptivo, está reemplazando al acartonamiento de los político y la abstracción de sus mensajes. Los nuevos modelos de comunicación privilegian lo auténtico por encima de lo guionizado, y en este contexto los políticos son terribles para la espontaneidad.
En muchos casos, proyectan un lenguaje no verbal que muestran lo incómodo que se sienten frente a la cámara y esto afecta al relacionamiento con la audiencia ya que el usuario digital se da cuenta cuándo el contenido se ve muy forzado e incómodo. La principal premisa de las campañas de color, se vuelve imprescindible: Tan importante como el mensaje es la forma en cómo comunicas el mensaje. La clave es ser creíble para tu audiencia y esto se logra a través de la autenticidad y el dominio de los nuevos medios.
Lo recalco: la proyección del mensaje es tan importante como el mensaje y en esto muchas campañas políticas se olvidan de un fundamento: el voto es emocional y muchos comunicadores racionalizan demasiado el lenguaje; es decir, no basta con ser espontáneo sino que además tu mensaje debe ser simple y creíble para que la audiencia, lo reciba de manera adecuada.
“Tan importante como el mensaje, es el delivery del mismo.”
Debido a que los políticos se deberán acoplar a estos nuevos modelos de comunicación, debo establecer que la evangelización del mensaje no cambia, cambia el delivery.
Y el mejor modo de adaptarse a estos nuevos cánones comunicacionales es integrar la campaña de color a tu estrategia de comunicación.
Campañas de color
La premisa de las campañas de color es que los influencers, los reels de Instagram y Tiktok han cambiado la forma en que consumimos la información. La clave para entender estos nuevos modelos de comunicación está en la cercanía. Al lenguaje sencillo que emplean los influencers debemos sumarles aspectos como la creatividad y la disrupción.
Los creadores de contenido que hoy están redefiniendo la comunicación, son hábiles para evitar las poses, los adornos y las pretensiones, al momento de comunicar. Procuran que su contenido sea lo más orgánico posible y entendieron que esa autenticidad conectaba con la gente.
La influencia de los creadores de contenido en la resignificacion de la comunicación es incontestable:
Los medios de comunicación tradicionales ya no interesan a las nuevas generaciones. Es algo que se viene avisando desde hace tiempo. Sin embargo, hay una novedad difícil de creer para quien no pertenezca a la generación Z: ni los diarios digitales ni Google convencen a los jóvenes. Ya sea para encontrar un restaurante, informarse de la actualidad o planear un viaje, muchos prefieren las redes sociales. Una práctica cada vez más común en la que son líderes TikTok e Instagram: el 40% de las personas entre 18 y 24 años recurren a ellas, según aseguró el vicepresidente sénior del motor de búsqueda, Prabhakar Raghavan, en la conferencia internacional Fortune Brainstorm Tech.
Hoy la empatía le gana a la política
“El mejor KPI es la empatía, más importante que el engagement es transmitir emociones, mejor que el alcance es darle lugar a la gente. Preocúpense más en compartir el contenido con la gente correcta que los números en sí.” Esto escribía en un grupo de whatsapp a un equipo digital de una campaña.
La empatía se define como la capacidad de comprender y compartir los sentimientos de los demás. La empatía nos enseña a tomar en cuenta a nuestros amigos y familiares y ser más receptivos con ellos.
La empatía es un estado emocional, que es muy bien asimilado por la audiencia; cuando nosotros hacemos un producto con la familia del candidato, con sus hijos, con sus primeros maestros, con sus padres, estamos justamente tocando fibras emocionales que hacen que nuestra audiencia se sienta rápidamente identificada y los obliga a suspender sus juicios críticos.
La gente se identifica más con un abrazo a un extraño que con un acto cupular, cualquier actividad dónde los líderes tradicionales (privilegiados) toman participación, es mal recibida por estas nuevas audiencias. Mientras que hacer una campaña de cercanía es una caricia hacia nuestros electores.
Campañas de Color Vs Campañas Corporativas
La teoría de las campañas de color fue descrita por mi para tratar de entender fenómenos políticos como Rodolfo Hernández o Xavier Hervas. Durante el estudio de sus campañas, me di cuenta que un punto en común entre ambas campañas; era el uso de la creatividad y la disrupción como medio para hacer llegar el mensaje a las personas.
Y eso son las campañas de color, atrevidas, espontáneas, originales, divertidas, disruptivas, frescas, irreverentes y sobre todo muy creativas, en contraparte con las campañas corporativas que son Politico-centristas, es decir basadas en un público político, en su voto duro, en su círculo rojo, y desde ahí no aportan más que liturgia política y fotos cupulares, les interesa mostrar músculo, más que gente.
Mostrar músculo y llenar la plaza es anacrónico, basar tu campaña en mostrar músculo pierde su valor estratégico hoy en día. Más importante que actos masivos, repletos de acarreados que son movilizados casi a la fuerza, es el BOCA a BOCA, ya sea de lo que pueda decir un taxista sobre tu campaña, o el tendero sobre tus propuestas, o el vecino sobre tu imagen, hoy se vuelve más efectivo esto que reunir a dos mil personas.
¿Qué pueden hacer los políticos?
Cambiar su cultura organizacional. Las organizaciones políticas son anticreatividad y antidisrupción, es momento de insertarse en un enfoque más contemporáneo. Menos política y mas empatía
Solo quién entiende a las nuevas audiencias sabrá hacer nuevas campañas.